jueves, 8 de noviembre de 2012

AVIONES DEL FUTURO


En los algo más de cien años de historia de la aviación, hemos pasado de unos aviones apenas capaces de elevar del suelo unos metros a sus pilotos a mastodontes como elAirbus A380 con sus dos cubiertas para pasajeros o el Antonov An-225 Mriya, capaz de llevar cargas de hasta 250 toneladas en su bodega.
Todo esto ha sido posible gracias a los continuos avances de la tecnología aplicada al campo de la aeronáutica, que junto con la carrera espacial ha sido uno de los principales motores del avance tecnológico, avance que no tiene pinta de ir a frenarse en los próximos años.
Ésta es una lista no exhaustiva de nuevas tecnologías en las que se está trabajando y que más probablemente que no acabaremos por ver en los aviones y aeronaves de los próximos años.


• Redes inalámbricas para sustituir los literalmente kilómetros de cable que llevan los aviones hoy en día para interconectar sus sistemas de vuelo y sensores, aunque obviamente tendrán que ser redes mucho más robustas que el WiFi que estamos acostumbrados a usar a diario. Esto permitiría unos importantes ahorros de peso e incluso montar más sensores de los que se usan en la actualidad, lo que a su vez podría permitir rediseños de ciertos componentes y partes de los aviones con ahorros de peso de hasta un 15% y por consiguiente de hasta un 12% de combustible.


• Otro campo en el que se está invirtiendo mucho esfuerzo es en el uso de combustibles alternativos mas ecológicos para reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera, pues se calcula que la industria aeronáutica es responsable de entre un 2 y 3 por ciento de las emisiones globales artificiales de este gas, y de hecho a partir de 2012 la Unión Europea va a obligar a las aerolíneas a limitar sus emisiones.

Zonas de mayor presencia de estelas de avión en porcentaje de áreas cubiertas.
La mayor parte procede del tráfico aéreo entre Europa y EE UU.
Gráfico: Aircraft Contrails Factsheet [PDF, 1,6 MB]

Tras numerosas pruebas por parte de muchas aerolíneas y fabricantes, Quatar Airways ha sido la primera en llevar a cabo un vuelo comercial utilizando una mezcla al 50 por ciento de queroseno y gas natural entre Londres y Doha, una combinación con una menor emisión de partículas que la del combustible tradicional, aunque también se dan paradojas como que las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos estén investigandoel uso de combustibles sintéticos con menores emisiones y más baratos para ser utilizados en bombarderos B-1B con capacidad nuclear. En el otro lado de la escala, elEmbraer EMB 202 Ipanema es un avión agrícola que tiene una versión propulsada por etanol.


• El uso de nuevos materiales en la construcción de aviones como por ejemplo compuestos de carbono y grafito o en especial materiales compuestos de matriz termoplástica, más ligeros y fuertes, no expuestos a la corrosión, y más resistentes a la fatiga, aunque también se está renovando el interés en los metales con nuevas aleaciones de aluminio, en especial las de aluminio-litio por su bajo peso frente a su gran resistencia, o algunas ya conocidas pero mejoradas. Se habla incluso de la posibilidad de incorporar sistemas que repararían automáticamente pequeños daños en las piezas formadas por compuestos. Estos nuevos materiales también se podrían aplicar en la construcción de motores, como por ejemplo en el uso de fibra de carbono para construir los álabes de las turbinas, que tendrían las mismas ventajas de un menor peso y mayor resistencia.


• En el campo de los motores, aparte de trabajar en diseños más eficientes, está resurgiendo el interés en los propfan, un tipo de motores que intentan unir la velocidad y prestaciones de los turbofán -los motores que montan en la actualidad la inmensa mayoría de los reactores comerciales- con la economía de combustible de los turbohélice, los motores que a su vez montan la inmensa mayoría de los aviones a hélice actuales.


 Un hipotético Airbus A30x con motores propfan

En el pasado este tipo de motores tenía el problema de ser excesivamente ruidoso, pero desarrollos recientes han demostrado que pueden ser tan silenciosos o más que un turbofán y de hecho Airbus y otros fabricantes están trabajando en diseños de aviones con este tipo de motor.


• Igual que el V-22 Osprey, una aeronave a medio camino entre un turbohélice y un helicóptero que puede bascular las góndolas de sus motores según la fase del vuelo en la que esté para comportarse como uno o como otro, en el futuro podríamos ver esta tecnología de cambio de forma aplicada de forma más general.


En el AD-1 experimental de la NASA todo el ala pivota sobre un eje central para adaptarse a la velocidad a la que va el avión en cada momento, adoptando una posición tradicional para las fases de vuelo lento, pero quedando casi paralela al eje del fuselaje para las de vuelo rápido
Se trata de aviones que adaptan su forma a las necesidades el vuelo, y aunque en la actualidad lo hacen mediante mecanismos que mueven partes, como por ejemplo hacía el mítico F-14 Tomcat cambiando la flecha de sus alas para ir a mayor o menos velocidad, en el futuro esta función la podrían desarrollar materiales «inteligentes» que cambien de forma en función de ciertos estímulos eléctricos que reciban.


• Aunque también existe la posibilidad no desdeñable de que en un futuro no muy lejano volvamos a ver dirigibles surcando los cielos, y no como plataformas publicitarias, sino dedicados al transporte de pasajeros a corta distancia, pues algún estudio ya apunta a que son más rentables que otro tipo de aeronaves al ser más baratos y no necesitar pista, e incluso al de mercancías a largas distancias
Pero de todos modos, como pasajeros, donde más notaremos los avances de la tecnología que vaya a bordo de los aviones será en los sistemas de entretenimiento de a bordo, esas pantallitas que van apareciendo en cada vez más respaldos de los asientos y que nos permiten ver películas, documentales, dibujos animados, escuchar música, etc…
Ya hay sistemas que permiten conectar un i Pod o similar a estos para que nosotros mismos llevemos a bordo lo que queramos ver, y algunas aerolíneas están empezando a ofrecer conexiones WiFi a Internet en sus vuelos, así como enchufes en los asientos para poder utilizar un portátil sin temor a quedarnos sin batería, con lo que podremos trabajar o divertirnos a nuestras anchas si el precio nos parece adecuado…
Aunque como contraprestación también es más que probable que en pocos años veamos cómo se extiende la posibilidad de usar teléfonos móviles en vuelo, terminando con uno de los pocos remansos de tranquilidad que existen todavía en cuanto a eso.
Eso sí, los verdaderamente aerotrastornados seguiremos prefiriendo el canal en el que se ve la posición del avión, su altura, velocidad, datos atmosféricos, distancia recorrida, distancia al destino y todos esos datos a cualquier otro canal.